martes, 30 de septiembre de 2008

TERCERA LECCION



BENDICIENDO.

La mayoría de nosotros decimos que somos hijos de Dios, pero realmente son muy pocos los que de verdad quieren reconocerlo como padre, son muy pocos los que lo creen, y son muy pocos los que luchan día con día por convertirse en alguien mejor.
Si nosotros realmente lo creyéramos, ya no habría limites para nada, pero no lo creemos, y menos lo sentimos.
Primero somos profesionistas, mujer, madre, hermana, hija,..humana! y no es así.
Estamos en este mundo para reconocer QUIENES SOMOS, a pesar de la dualidad, a pesar de ver nuestro cuerpo humano, y para entrar al reino de los cielos, debo RECONOCER, SENTIR, CREER y comportarme como un hijos de Dios.
Un ser humano es un cuerpo, una mente separada del espíritu.
Un hijo de Dios es la trinidad hecho UNO
Por algo Jesús dijo: “no todo aquel que diga señor, señor entrara al reino de los cielos”, claro! No puedes entrar, ni recibir todas las bendiciones, si no puedes creer quien eres, un ser divino, sin errores, un ser perfecto creado por Dios.
Por algo los Ángeles me decían muchas veces “ustedes se comportan como lo que no son” y así es! Actuamos como seres abestializados, que odian, matan y crean todo el santo día cosas negativas para los demás y en consecuencia para nosotros mismos.
Un Hijo de Dios en cambio, solo piensa bien! Siempre esta creando energías divinas, tiene el poder de crear todo el bien que desee, tiene el poder de amar pero de amar de verdad.
El ser humano vive el 98% de su vida en el pasado que ya no existe y el 2% en el futuro que aun no es y que siempre puede ser cambiado.
Un Hijo de Dios vive el 100% en el presente, en el hoy, en el ahorita, porque sabe que en ese momento, en ese tiempo es donde esta Dios y su fuente divina de creación, ahí es donde esta la puerta para entrar al reino de los cielos.

Acepta quien eres, acepta que eres HIJO DE DIOS y empieza a comportarte como tal, piensa siempre bien, únete en esencia a los demás y bendice.
Bendición quiere decir “desear el bien”
Cuando nosotros bendecimos a los demás, nos llenamos de una hermosa energía de color blanco, se cubre nuestra aura o entorno con la energía de Dios, porque Dios es el ZUMO BIEN.
Es bendiciendo a los demás cuando reconocemos y nos comportamos como verdaderos Hijos de Dios.
Enviamos con nuestra bendición a miles de Ángeles, Ángeles de todas las jerarquías para que cubran con su luz a aquel que hemos bendecido.


PRACTICA SEMANAL
BENDICIENDO


1.- Cada mañana al despertar, ofrécele a Dios tu mente.
“hoy solo tendré pensamientos de bien”



2.- y cada ves que te cruces o veas a alguien, ya sea persona, animal o planta, di en tu mente “DIOS ESTA AHÍ”
eso te ira uniendo en esencia a toda la creación del Padre, empezaras a ver y a sentir a Dios en cada ser vivo, y atraerás lo mejor de los demás


3.- Pide algo bueno para cada persona que se cruce en tu vida.
“bendícelo” en tu mente, deséale el bien que necesite.
Si es pobre, pide prosperidad, si esta enfermo pide sanacion, si esta molesto envuelvelo en paz, si ves niños pide a sus Ángeles guardianes que los protejan contra todo abuso y los llenen de luz, en fin pide por todo el mundo!.
Mientras mas y mas pidas, mas pronto te convertirás en un ser de luz, en un ser de amor y en verdadero Hijo de Dios!

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